Las agrupaciones de voluntarios de Protección Civil de Castilla-La Mancha realizaron, el pasado ejercicio, el mayor número de actuaciones desde 2010, llegando a contabilizar un total de 2.680. Estas intervenciones estuvieron coordinadas por el Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2, organismo perteneciente a la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas.
En este sentido, cabe destacar que tras varios años de estabilización en el número de actuaciones llevadas a cabo por las agrupaciones de voluntarios, durante 2017 se produjo un incremento sustancial con respecto al año anterior, registrando 358 intervenciones más que en 2016.
Así, durante el pasado ejercicio, y según los datos de activación y coordinación recogidos por el Servicio de Atención de Emergencias 1-1-2 de Castilla-la Mancha, las agrupaciones de Protección Civil de la comunidad autónoma tuvieron una mayor actividad durante los meses de julio y agosto, cuando se contabilizaron más de 290 activaciones en cada uno de ellos.
Este número de intervenciones de las agrupaciones de voluntarios durante los mencionados meses es normal, dado que es durante la época estival cuando se producen un mayor número de activaciones, dado que en esas fechas se incrementan el número de habitantes en muchos pueblos de Castilla-La Mancha, aumentando también los incidentes como los incendios de vegetación y el extravío de excursionistas en el monte, entre otros.
Por el contrario, fueron los meses de febrero y mayo, con 164 y 170 actuaciones, respectivamente, las épocas del año en que las agrupaciones de Protección Civil de la región llevaron a cabo el menor número de intervenciones.
El alto número de actuaciones llevadas a cabo por los voluntarios de Protección Civil, ponen sobre la mesa la importancia de estos grupos de intervención, dado que las agrupaciones son una pieza indispensable en los mecanismos de actuación en emergencia dentro de Castilla-La Mancha.
De hecho, en una región tan extensa como la nuestra, estos grupos de voluntarios se han convertido en partes imprescindibles para llevar a cabo determinadas actividades como los dispositivos de búsqueda de personas desaparecidas, dado que el mayor conocimiento que tiene de su comarca es una garantía para llevar a cabo estas intervenciones.
Por este motivo, desde la Dirección General de Protección Ciudadana, dependiente de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, se presta un apoyo directo a estas agrupaciones, respaldando el trabajo de los voluntarios de Protección Civil tanto a través de la formación inicial y específica, como mediante ayudas y subvenciones para material y uniformidad.