El Gobierno de Castilla-La Mancha ha realizado hoy un simulacro de una situación de emergencia generada por inundaciones en la localidad toledana Alcaudete de la Jara. En el ejercicio han participado más de 250 efectivos de los diferentes grupos de intervención, cuyo objetivo ha sido reforzar la aplicación de los protocolos y medidas de actuación recogidas en los planes de emergencia y, más concretamente, en el Plan Especial de Emergencias de Protección Civil ante el Riesgo de Inundaciones (PRICAM), así como en el Plan de Emergencia de la presa del Río Gévalo, ya que desempeña un papel reseñable durante el desarrollo del simulacro.
Así lo ha explicado, en declaraciones a los medios de comunicación desplazados a la zona, el viceconsejero de Administración Local y Cordinación Administrativa, Eusebio Robles, quien ha estado acompañado por el director general de Protección Ciudadana, Emilio Puig; la directora gerente de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Montserrat Muro; el delegado de la Junta en Talavera, David Gómez; la delegada provincial de Hacienda, Administraciones Públicas y Transformación Digital, María Castaño; la alcaldesa la localidad, Cristina Cebas; y el gerente de Urgencias y Emergencias de Transporte Sanitario (GUETS) del SESCAM, Alberto López.
Al inicio del simulacro, todos aquellos dispositivos móviles que se encontraban en las inmediaciones de Alcaudete de la Jara han recibido un mensaje del sistema Es-Alert, procedente de la Red de Alerta Nacional (RAN), informando de la realización de este ejercicio y también del uso de las sirenas de la presa, para avisar acústicamente a la población durante el desarrollo del mismo.
La hipótesis del simulacro se basa en la emisión, por parte de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), de un boletín de aviso de nivel naranja por riesgo de precipitaciones en la comarca toledana de La Jara, ocasionando, en un primer momento, un rápido llenado de la presa del río Gévalo, ubicada en el término municipal de Alcaudete de la Jara, con posibilidad de rotura de la misma y, consecuentemente, un riesgo inminente de avenida.
En el ejercicio se simula una importante y rápida acumulación de precipitaciones que acaban generando balsas de agua, escorrentías e inundaciones en diversos puntos de la localidad. Precisamente, el simulacro contempla la evacuación de un colegio, el salvamento de unas personas atrapadas en el interior de un coche, que ha sido arrastrado por el agua, el rescate en altura de dos senderistas atrapados en el cauce del río y también un achique en una vivienda, cuyos inquilinos son personas dependientes.
Desalojo de un centro escolar y rescate de dos senderistas
Dentro del simulacro y como consecuencia de las lluvias, comienza a inundarse algunas instalaciones del colegio de educación infantil y primara CEIP ‘Rufino Mansi’, que tiene que ser evacuado y que, junto con la ayuda de la agrupación de voluntarios de Protección Civil de localidad, procederá al traslado de varios alumnos y profesores a un albergue provisional, desplegado por Cruz Roja en la plaza del Ayuntamiento.
Otra de las intervenciones destacadas en el desarrollo de este ejercicio es el rescate en altura de dos senderistas, que han quedado atrapados en el cauce del río Gévalo, agarrados a una viga del puente de la N-502 mientras el agua les llega más arriba de la cintura. La maniobra, realizada por bomberos del CPEIS, consiste en descender y subir a las dos personas afectadas, desde el puente, para poder evacuarlas a una zona segura.
Con este tipo de ejercicios, desde el Ejecutivo regional, se pretende trabajar el correcto funcionamiento interno del Plan Especial de Emergencias de Protección Civil por Inundaciones para garantizar su efectividad, así como la rapidez de respuesta de los grupos de acción y las medidas de protección aplicadas a la población.
Destaca la importancia de las comunicaciones entre los distintos grupos de intervención que participaron en este ejercicio, ya que una correcta comunicación facilita la coordinación, y sirve para garantizar la activación de todos los efectivos que tendrían que intervenir para dar una respuesta eficaz ante este tipo de emergencia.
En el desarrollo del simulacrohan participado efectivos de efectivos de Guardia Civil; Bomberos del CPEIS de Toledo; personal adscrito al Plan Especial de Emergencias por Incendios Forestales en Castilla-La Mancha (INFOCAM); personal del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM); Cruz Roja; agrupación de voluntarios de Protección Civil de Alcaudete de la Jara, Palomeque, Almorox, Escalona y La Puebla de Almoradiel; Servicio de Protección Civil y del Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha. A ellos se han sumado alumnos de Formación Profesional del IES Fernando Zobel de los ciclos formativos relacionados con Emergencias Sanitarias, Emergencias y Protección Civil.