La Escuela de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha, dependiente de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, ha llevado a cabo durante este mes de febrero un total de 9 cursos de formación, agrupando a 260 alumnos procedentes de los distintos cuerpos de activación en emergencias.
De esta manera, el grupo que ha sumado un mayor número de actividades formativas ha sido el de Policía Local que, además, ha sido también el cuerpo que ha aportado un mayor número de alumnos este mes a la Escuela, con un total de 150.
Entre los cuatro cursos que se desarrollaron para este cuerpo policial cabe destacar el de “actuación policial ante los animales peligrosos”, una nueva formación cuyo fin es ofrecer a los policías locales unas pautas prácticas de actuación ante animales de riesgo. En esta actividad se pone especial interés en los perros de razas consideradas peligrosas, con el fin de favorecer su identificación y cuál debe ser el procedimiento para intervenir.
Los otros tres cursos destinados a este cuerpo de seguridad municipal tienen que ver con la actualización de los reglamentos en materia de tráfico; actividades de reciclaje de tiro policial y sus estrategias y el inicio del curso de especialista en Policía Judicial, nivel I.
Por su parte, los cuerpos de extinción y rescate han podido cursar durante este mes una formación especialmente interesante, destinada a aplicar técnicas de apuntalamientos de emergencia. Una actuación importante en aquellos casos de edificios o estructuras con riesgo de derrumbamiento, en los que los bomberos deben seguir trabajando para salvaguardar la vida o bienes de los ciudadanos.
Esta actividad, eminentemente práctica, se ha desarrollado en el Parque de Bomberos de Albacete, que ha colaborado activamente con la Escuela de Protección Ciudadana, y en ella han participado un total de 20 alumnos, procedentes de distintos parques de extinción de incendios de toda la comunidad autónoma.
También, durante el mes de febrero un total de 70 voluntarios de agrupaciones de Protección Civil de Castilla-La Mancha han podido realizar tres cursos destinados especialmente para ellos. Uno de los más significados ha sido el destinado a identificar y prevenir las distintas formas de violencia de género, una actividad que se ha llevado a cabo en Guadalajara, en colaboración con el Instituto de la Mujer de Castilla-La Mancha, y que servirá para que estos voluntarios puedan ayudar en la lucha contra esta lacra social.
Además, los integrantes de algunas de estas agrupaciones se han formado también durante este mes en los procedimientos generales sobre la extinción de incendios de vegetación, una de las actividades más comunes que suelen acometer los voluntarios de Protección Civil en la época estival. También, se ha desarrollado en febrero una jornada sobre intervención con personas con discapacidad, destinada al colectivo de voluntarios.
Por último, un total de 20 alumnos han participado en un curso sobre el uso del desfibrilador automático y las técnicas de reanimación cardiopulmonar, al que han podido acudir alumnos de diferentes cuerpos de activación en emergencias.