Ofrecer a los voluntarios de las agrupaciones de Protección Civil de Castilla-La Mancha todas las herramientas formativas necesarias para poder afrontar situaciones de emergencia, apoyando de una manera directa y efectiva a los grupos de activación profesionales como bomberos y sanitarios, es el objetivo del Curso Básico que se lleva a cabo en la Escuela de Protección Ciudadana de la comunidad autónoma, dependiente de la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas.
Durante el presente año se está desarrollando el décimo tercer Curso Básico, en el que van a participar más de 420 voluntarios procedentes de agrupaciones de toda la región.
Este curso se ha dividido en un total de siete ediciones, repartidas en las cinco provincias, con el fin de facilitar a los voluntarios de Protección Civil la realización del mismo, reduciendo también los posibles costes de desplazamiento a estas personas.
En este sentido, los cursos se han desarrollado en Villanueva de la Torre (Guadalajara), Ciudad Real, Cuenca, dos en Toledo (uno de los cuales se está llevando a cabo esta semana) y queda pendiente que en noviembre se pongan en marcha las dos últimas ediciones de 2015 en Albacete y Guadalajara.
El curso, que deben realizar todos aquellos voluntarios que se incorporan por vez primera a las agrupaciones, consta de un total de 60 horas, que se dividen en seis módulos en los que se imparte la formación básica necesaria para poder actuar en situaciones de emergencia.
De esta manera, se ofrece enseñanza sobre Protección Civil; actuación en diversas situaciones emergencias como incendios forestales; comunicaciones; seguridad vial y prácticas en agrupaciones. Uno de los módulos más destacados es el dedicado a la actuación sanitaria básica, en el que se enseña a los voluntarios a realizar la reanimación cardiopulmonar, recibiendo también formación sobre el uso de desfibriladores semiautomáticos.
De esta manera, el Gobierno regional, a través de la Dirección General de Protección Ciudadana velan constantemente por conseguir que los voluntarios de Protección Civil, que son el auténtico ejército solidario de Castilla-La Mancha, se encuentren preparados para afrontar aquellas situaciones de emergencia ante de la llegada de los cuerpos de activación profesional, siendo después un apoyo esencial para estos mismos grupos.